Publicado en Editorial de
RRHHDigital, 19 de Junio del 2023
El siguiente relato ficticio trata de una conversación telefónica
entre la directora de rrhh con el director de producción de una empresa
cualquiera. A través de las palabras de la protagonista, el lector puede
imaginar e intuir la parte de la conversación que falta, el tono, el lenguaje no verbal, etc .. En el relato se pueden apreciar distinciones como: la
asertividad, serenidad, el quiebre, las conversaciones de posibilidad, lo que es importante/urgente o distinciones de liderazgo/autoridad, entre otras ..
Siento que aún no te hayas tomado el café,
pero es importante. Como sabes, esta mañana tengo una reunión con el Comité de
Empresa y no voy a poder ver a Alfredo, el Director General de Producción, que
quiere reunirse por un tema de su departamento. Dice que es muy urgente.
¿Podrías recibirle?
Ayer, ya le adelanté que hoy posiblemente
no podría y que durante la mañana le diría algo, pero dado que anoche me envió
varios whatsapps, muy agobiado, porque se va mañana de viaje, quiero que le
recibas tú. Si me dices que sí, yo le llamo, me excuso y le cuento que tú
puedes reunirte con él.
Perfecto, cuando tengáis la reunión, me
cuentas y vemos cómo gestionamos, pero sería interesante que, en el futuro, tú
pilotes este tipo de reuniones de “apagafuegos” pues eres muy empática y
transmites serenidad y seguridad. Y estoy convencida que sabrás encontrar una
solución para que se tranquilice.
Alfredo, buenos días, como te dije ayer,
finalmente hoy no voy a poder verte, pero dado que te apremia el asunto que me
quieres contar, te propongo que te reúnas con María.
Si, claro, María, la subdirectora de
Recursos Humanos. Entiendo que es un tema de recursos humanos lo que me quieres
plantear, ¿no es así?
María te puede recibir y puedes contarle a
ella eso que no me puedes decir por teléfono. ¿Te parece?
Yo ya le he informado de que me has
enviado por whatsapp tu interés de que sea cuanto antes la reunión, porque
quieres contarnos algo importante y mañana sales de viaje.
Es que, como te he dicho hoy tengo reunión
con el Comité de Empresa y quiero prepararme antes la reunión. Espero que lo
entiendas. Es un tema, que no sólo es importante para mí, sino que también es
importante para todos los trabajadores, lo que te incluye a ti también.
Bueno …., si realmente son dos minutos, te
escucho.
Entiendo lo que me dices y si te parece,
primero te reúnes hoy tú, como Director de Producción con María, y a tu vuelta
de viaje, tenemos una reunión con tu equipo, todos juntos e individualmente,
con todos y cada uno de ellos, y buscamos una solución.
Te entiendo Alfredo, pero la vida no es
como tú la pintas, y menos en la empresa. Estoy segura que tú, como
responsable, tienes claro el problema y la solución, pero si tienes un “motín”
en tu departamento, como me estás diciendo, hay que ver qué es lo que está
ocurriendo. Por ello, reunirse con todos y escuchar a todas las partes, es
importante. Hay que conocer, no sólo lo que tú piensas que estoy convencida de
que, como director del departamento, eres el que tienes un mapa de toda la
situación y de tu gente. Incluso que tendrás soluciones.
Alfredo, no se impone nada, hay que
escuchar a todas las partes y saber qué es lo que está pasando, en dónde
mejorar y cuestionar todo lo que se diga.
Si hay problemas mayores, cuando lo hables
con María, ella te podrá decir si hay que enviar alguna amonestación a alguien,
pero hay que hablarlo más despacio y por eso, te ruego que te reúnas con ella.
No amenaces a nadie. Así no vas a
conseguir nada. Es contraproducente. Diles que estás valorando cómo solucionar
el problema y, como cosa tuya, que nos vas a proponer una reunión de todo el
departamento de Producción con el departamento de RR.HH., con el fin de que
sientan que tú eres el líder y quien quiere solucionar este asunto de la
discordia. ¿Te parece? Y, ya cuando tengamos esa primera reunión y os escuche a
todos, os puedo proponer un proceso de Coaching, entre otras cosas.
Si Alfredo, para todos, para todo el
equipo. El proceso sería para todos, no sólo para tu gente, tú también estas
incluido porque tú eres parte del equipo. Y, por cierto, la más importante.
Si, claro, consiste en un proceso
individual de unas seis sesiones coaching a cada miembro del equipo con un
coach y un proceso de Coaching de Equipos, a más largo plazo.
Hazme caso que estoy convencida que os
vendrá bien a todos.
Tranquilo, y no me levantes la voz, que no
te puedo escuchar y no te entiendo.
Claro que sé que tenéis que sacar la
producción de este año, pero estoy pensando, no sólo en sacar la producción
adelante este año, también estoy pensando en las personas, en la empresa y en
el departamento que tú diriges. Y para ello hay que extrapolarlo, tanto para
este año, como para el futuro.
Y disculpa … que llevamos quince minutos
hablando por teléfono de este tema, cuando te di dos minutos de mi tiempo. Yo
sé que tu tiempo es importante, pero el mío también es muy importante y dado
que te he escuchado, incluso ofrecido varias soluciones, considero que tú no
estás teniendo conmigo la misma deferencia, ni la misma empatía, ni -siquiera-
el respeto necesario. Te recuerdo que tengo algo muy importante que preparar.
Piénsatelo. Como te he dicho antes, te
propongo que hables con María por lo que tienes que llamarla y pedirle esa
reunión. Yo le voy a hacer un resumen de lo que me has dicho, pero eres tú el
que tienes que ponerte en contacto con ella y contarle todo, desde la
serenidad. Y como te he dicho, si ambos consideráis que hay que enviar alguna
amonestación, pues ella tomará la decisión y actuará en consecuencia.
María es una gran profesional y sabrá
ayudarte. Cuando os hayáis reunido, me envías un correo electrónico
informándome de la fecha para agendar la reunión con todo tu departamento y tu
percepción del problema después de hablar con María.
Respira y que tengas un buen día.