Mostrando entradas con la etiqueta miedo. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta miedo. Mostrar todas las entradas

El duelo y su gestión

Cuando tenemos una pérdida, bien sea de la vida de una persona allegada o de una mascota, de un bien, de una situación, es cuando pasamos por un duelo. Es decir, tendremos momentos de sufrimiento personal al ser conscientes de que ya no volveremos a ver y estar con esa persona, mascota, enser o situación. El duelo también se sufre cuando cambian las situaciones cotidianas como puede ser romper con una pareja, con tu trabajo, suspender un examen, perder tu casa, ...

Alguien me decía que no sabía cómo afrontar el duelo por la pérdida de su mascota porque lo estaba pasando muy mal, tanto física como emocionalmente, y sus amigos no le entendían.

Gráfica del duelo: pérdida, negación, enfado, miedo, tristeza, aceptación y rehabilitación
El duelo es algo muy personal, cada uno lo afronta de forma diferente y necesita su tiempo para superarlo. En unos casos el tiempo será más corto y en otros más largo; en unos más intenso y en otros más ligero. El duelo que significa dolor en latín, es el proceso por el que pasa una persona ante una pérdida de alguien o algo, y el proceso que lleva consigo de los cambios que irán ajustándose para acomodarse a la nueva situación.

El dolor (dolores de cabeza, por ejemplo) es algo físico y el sufrimiento, es emocional. A veces el duelo lleva ambos componentes. El dolor no se elige y el sufrimiento que surge ante la pérdida, hemos de ser capaces de gestionarlo para seguir avanzando. 

Quizás viendo la gráfica del duelo, sirva para ayudar a comprender los estados por los que se pasa en un proceso de duelo. Indicar que los procesos de duelo son algo natural que pasan y que de ellos se sale más fuerte y con un aprendizaje, sin que quede en el olvido la pérdida.

 

¿Qué nos perdemos cuando somos exigentes?

La exigencia es teóricamente la cualidad que nos impulsa a realizar las cosas bien hechas. Digo teóricamente porque hay un trasfondo detrás que lo que provoca realmente es intransigencia y hacernos daño, bien a nosotros mismos, bien a otras personas. El que es exigente con uno mismo, lo es también con quienes le rodean. 

Con la exigencia nos hacemos daño porque queremos hacer las cosas lo más perfectas posibles y eso no siempre se consigue. Nos culpabilizamos de no hacerlo bien.También ocurre cuando exigimos a los demás. Entonces nos volvemos controladores y eso provoca que nuestras relaciones se deterioren porque a los demás les hacemos sentirse mal. 

Asistóteles decía: La exigencia no busca hacer las cosas lo mejor posible, sino hacerlas perfectas. La excelencia consiste en generar un hábito y no solo una acción.

Me gustaría que por un momento pensases: ¿qué pasa si no conseguimos alcanzar en nuestra tarea? Y ¿qué pasa cuando no lo consiguen los que nos rodean? Nosotros, si no lo alcanzamos, nos frustamos y cuando no lo consiguen nuestros allegados, les culpabilizamos de que no se han esforzado. Vivimos en una insatisfación permanente.

Veámos cómo podemos convertir esa exigencia en excelencia para disipar la ansiedad que nos provoca:                                                     

                                               EXIGENCIA & EXCELENCIA                                          

 

Tiene que ver con el

 

SER. Soy torpe.   

HACER. No lo he hecho bien, volveré a hacerlo de nuevo.

Es para nosotros un@

OBLIGACIÓN

DESEO, un objetivo, reto.

Se trabaja con

ANSIEDAD, TENSIÓN

RELAJACIÓN

Ello provoca

PARALISIS

CONFIANZA, ILUSIÓN

Buscamos la

PERFECCIÓN

MEJORA CONTINUA

El error es un

FRACASO

RETO

Sentimos

FRUSTRACIÓN

TOLERANCIA

Solemos

NO DELEGAR, por miedo a que lo hagan mal

SI DELEGAMOS permitiendo que se equivoquen y aprendan

Nos provoca

REPROCHE Y DESVALORIZACIÓN

APRENDIZAJE Y DESARROLLO

Nos produce

MIEDO, INSATISFACCIÓN

Aflora la CREATIVIDAD Y SATISFACIÓN


En definitiva, si somos 
EXIGENTES, nos centramos en nosotros, en nuestro ser, haciendonos daño al no conseguir nuestros propósitos (soy idiota por no haberme dado cuenta). Y si somos EXCELENTES, hablamos de la tarea, lo que nos permite avanzar, aprender y sentirnos bien. (para ser la primera vez que monto un mueble, no me ha quedado mal. Seguro que la próxima vez lo hago mejor y en menos tiempo).

¿Qué nos perdemos cuando somos exigentes? nos perdemos disfrutar y buscar otras alternativas que nos permitan alcanzar el objetivo que buscamos, dandonos valor. Cambiando la exigencia a la excelencia, nos sentiremos mejor y nuestras relaciones serán más satisfactorias.  ;-)


¿Cómo hacemos cuando crecemos como seres?

En algunos momentos de la vida, nos sentimos inseguros, vulnerables, dudamos a la hora de tomar decisiones porque desconocemos si lo que queremos hacer estará bien, si debería hacerlo de otra forma, o si tendría que dejarlo y ... . 

Esta retahíla de preguntas y dudas son normales. Aparecen cuando indagamos tomamos conciencia de lo que hacemos o dejamos de hacer. Es lo que se llama salir de nuestra caja de confort.

Para solucionar estas sensaciones de vértigo y miedo, buscamos soluciones que nos hacen aprendercrecer y descubrir nuevas formas de ser.  En Coaching lo explicamos a través del modelo de aprendizaje que consiste en:


Cuando tomamos una decisiónobtenemos un resultado. Puede que sea el resultado esperado u otro no contemplado. Si es esperado/deseado, archivaremos en nuestra mente el modelo que hemos realizado para  utilizarlo más adelante. Sin embargo, si  el resultado no es el esperado y tenemos el compromiso de alcanzarlo, buscaremos otros caminos hasta conseguirlo. Esto en Coaching se llama Aprendizaje de primer orden, que es cuando cambiamos la acción para alcanzar el objetivo. Si no tenemos compromiso, abandonamos y entonces aparece la frustración: y ni hay resultado, ni hacemos nada para enmendarlo. 

En Coaching no hablamos de fracasos, sino de errores, que es lo que nos permite mejorar el procedimiento, dandonos la oportunidad de volverlo a intentar, con lo que adquirimos un aprendizaje. Cuando lo consideramos un fracaso, no cambiamos y nos quedamos quietos. Entonces no hay aprendizaje, sino inmovilismo, resignación  y argumentos que justifiquen el resultado.  

El Aprendizaje de  segundo orden es cuando, en lugar de cambiar la acción, cambiamos el observador que somos. Es decir, nosotros actuamos como actuamos porque cada uno de nosotros somos un compendio de creencias, experiencias, emociones, sentimientos, valores, etc. que  nos hace ser únicos y actuar de una determinada manera. La mejor que conocemos. Ahora bien, si somos capaces de indagar el tipo de observador que somos, comprobando las creencias que nos acompañan, seremos capaces de distinguir cómo observamos el mundo que nos rodea y ello nos permitirá intervenir en nosotros mismos, cambiando las gafas con las que miramos o filtros que nos hacen movernos en la dirección que hemos elegido. Así, nos permitirá conocer que siendo de otra forma, cambiando nuestros juicios, podemos tener resultados diferentes.

Y finalmente, el  Aprendizaje transformacional, es cuando .. nos damos cuenta del cambio que hemos hecho aplicando con las fortalezas aprendidas que nos permite utilizarlas en un futuro. Es decir, cuando no sólo cambiamos la acción u observamos de otra forma, sino que cambiamos el SER que somos, transformándolo y manteniéndolo en el tiempo a través del conocimiento, la confianza, la responsabilidad, el compromiso, la creatividad,  ... lo que nos impulsará a conseguir los resultados extraordinarios. Crecemos, aprendemos a ser de otra forma diferente, incorporando nuevas tácticas, nuevas creencias, nuevas fortalezas.
       
          ¿Y tú, cómo aprendes?